¿Son viables las Denominaciones de Origen e IGP´s pequeñas?
Un investigador gallego demuestra la viabilidad de las Denominaciones de Origen e Indicaciones Geográficas Protegidas a pequeña escala, centrándose en la de O Cebreiro, y resalta que no deberían descartarse por su tamaño
A pesar del número muy limitado de productores, un investigador gallego afirma que incluso las Denominaciones de Origen Protegidas (DOP) e Indicaciones Geográficas Protegidas (IGP) más pequeñas pueden tener un impacto significativo en las áreas rurales. En esto se centró el predoctoral de la Universidad de Santiago de Compostela Rubén Boga González, quien está elaborando parte de su tesis sobre la viabilidad de los sistemas de DOP/IGP a pequeña escala en base a técnicas cualitativas.
Según sus indagaciones, las IGP de pequeña escala confieren una ventaja de mercado a sus productores registrados, brindándoles la oportunidad de mantener su producción agrícola localizada en el territorio. Así lo demuestra en el artículo ‘»¡Debido a su tamaño, no valle la pena!»: La viabilidad de los sistemas de indicaciones geográficas a pequeña escala’.
La investigación se centra en los casos de O Cebreiro (Galicia) y Tolminc (Eslovenia). «Escogí O Cebreiro por cercanía y por mi vinculación con las DOP y las IGP, ya que son hijo de productores de pimiento de Herbón». Asimismo, conocía la situación de los productores del queso de O Cebreiro y «sabía que eran muy pocos, entonces esa situación me pareció que era relevante para trabajar en mi tesis». Destaca que la mayoría de las investigaciones están centradas en DOP o IGP a grandes escalas, sin embargo se olvidan de las más pequeñas, «por eso me pareció interesante investigar en este sentido».
Asimismo, tanto Rubén Boga como su director de tesis Valerià Paül, coautor del artículo, forman parte de un proyecto de investigación que está aprobado a nivel de la Unión Europea denominado HIGHLANDS.3, que financia movilidades en otros países de la UE y tiene por objeto investigar iniciativas de desarrollo sostenible en áreas de montaña. Dentro de unos años, el proyecto se cerrará con la reunión de los investigadores e investigadoras participantes en la USC, donde podrán conocer algunas experiencias destacables de desarrollo sostenible en las montañas gallegas. Así dieron con el caso de Eslovenia, donde Rubén hizo una estadía de investigación con otros socios del proyecto, en este caso una agencia de desarrollo rural local. «Era una zona que también contaba con un queso con DOP, pero que tan sólo tenía dos empresas inscritas».
Los casos de O Cebreiro y de Eslovenia
Ambos casos tienen puntos en común, pero también «son muy distintos». En el caso de O Cebreiro, según los datos oficiales de la Consellería de Medio Rural, son sólo cuatro productores registrados. Sin embargo, cuando Boga comenzó sus indagaciones, se enteró de que tan sólo dos estaban produciendo queso de manera profesional, es decir, vivían de eso. Otro productor inscrito tenía otra actividad principal, que era a ganadería de vacuno de carne en ecológico, y otro actualmente ya no produce. «En resumen, se trata de pequeñas empresas familiares». En el caso de Eslovenia, por el contrario, hay una empresa familiar y otra cooperativa que aglutina la bastantes personas. «Realmente, a mí me parece que hacen un trabajo excelente ya que al mantener una buena remuneración a los productores de leche, permiten que esta actividad no desaparezca del territorio».
La eliminación de los Consejos supondría una pérdida de autonomía para las DOP e IGP
Esta cooperativa tiene un mayor volumen de producción y una mayor capacidad para influir en el mercado, por lo que también semeja concentrar los beneficios de la DOP. Segundo explica, las personas entrevistadas en el ámbito esloveno señalaban que la cooperativa mantenía una buena remuneración a los productores de leche y que así contribuía a mantener la actividad ganadera en el territorio; sin embargo «algunas entrevistadas también me señalaban que esa situación podía cambiar con una simple decisión corporativa de los administradores de la empresa». Esa situación contrasta con el caso de O Cebreiro, en el que cambios de este tipo dependerían de una mayor multiplicidad de productores.
Colaboración de las administraciones públicas
Otro de los factores por lo que le interesó desarrollar este tema es porque en las administraciones públicas empezaban a valorar si los Consejos Reguladores de las DOP e IGP pequeñas eran viables, al contar con pocos productores. «Como no son sostenibles de manera autónoma existe la propuesta de eliminarlos y que pasen a gestionarse directamente por la Agencia Gallega de la Calidad Alimentaria (Agacal)». Boga destaca que esta institución aporta una ayuda «inestimable» a los Consejos Reguladores pequeños, pues debido a su tamaño muchas veces resulta complejo que puedan controlar la calidad de las producciones, así como realizar las campañas de promoción o informes estratégicos necesarios, pero su eliminación supondría una pérdida de autonomía de las propias DOP e IGP. Aun así, considera que dentro de un Consejo son los propios productores «los que están organizados en el territorio y deben decidir sobre el producto, porque nadie mejor que ellos lo conoce». Boga recalca que este tema le pareció de interés y que por eso quería demostrar la viabilidad de los pequeños Consejos, aunque tengan dificultades, «pero nadie mejor que ellos conoce el territorio y siempre deben tener voz y voto».
En el caso de O Cebreiro, la gestión de la DOP depende de los propios productores, «ya que son ellos mismos, en consenso con las administraciones públicas, los que determinan las características para que un queso sea considerado de O Cebreiro». En el caso esloveno, por el contrario, la figura legal de los Consejos Reguladores es inexistente, así «algunos productores no cuentan con la posibilidad de consensuar cambios en el reglamento de la DOP que se acomoden a sus necesidades, por ejemplo, de hacer ruedas de queso menores de los 4 kilos que exige su pliego de condiciones para su mercado».
Mayor valor en la zona del Cebreiro
El artículo también destaca como dichas DOP e IGP contribuyen a la marca de las regiones, en sinergia con la actividad turística. En el caso de O Cebreiro, además, la DOP no sólo permitió que se mantuviera una producción que estaba a punto de desaparecer, sino que «hoy en día, el queso de O Cebreiro tiene un precio más alto que cualquier queso gallego». Esto llevó a que se pusiera en valor la zona y nacieran queserías artesanales que comenzaron una vez nació la DOP. De hecho, «estos productores venden con precios similares». La situación lleva a que los beneficios se extiendan más allá de la propia DOP. Todo esto también tiene una parte negativa, ya que estos al permanecer fuera no están sosteniendo la DOP; bien porque quieren evitar pasar los controles de calidad y pagar al Consejo Regulador por ellos, o porque no quieren tornarse profesionales. «En definitiva, son beneficiarios de la DOP, pero no contribuyen a mantenerla ni a su Consejo Regulador, y esta es una de las razones por la que existen tan pocos inscritos en ella».
En resumen, las DOP e IGP de pequeña escala no deberían descartarse por su tamaño. De hecho, su contribución al desarrollo rural podría incluso igualar la de sus homólogos más grandes, especialmente en aquellas zonas con menos oportunidades de desarrollo económico, como es el caso de muchas de las regiones montañosas de Europa. En esta investigación, Boga demostró que el tamaño no presagia el impacto que podría tener una DOP/IGP para el desarrollo rural de la región en la que está.